La entrada en vigencia de la llamada Ley Karin representa un cambio significativo en la forma en que las organizaciones en Chile deben abordar el acoso y la violencia en el entorno laboral.
Esta normativa, aprobada en 2023 y con plena aplicación desde 2024, establece nuevas obligaciones para los empleadores en materia de prevención, denuncia, investigación y sanción de situaciones que afecten la dignidad y seguridad de los trabajadores.
Esta ley responde a una creciente necesidad de generar ambientes laborales saludables, y obliga a las empresas a adoptar medidas concretas de prevención y control en sus áreas de recursos humanos.
En este artículo revisaremos los puntos clave de la Ley Karin, sus implicancias legales y cómo las empresas pueden apoyarse en herramientas tecnológicas y buenas prácticas para garantizar el cumplimiento normativo.
La Ley Karin modifica el Código del Trabajo y busca reforzar la protección frente al acoso laboral, sexual y cualquier forma de violencia en el ámbito del trabajo. Su nombre conmemora el caso de Karin Estívariz, una trabajadora pública que falleció luego de sufrir acoso laboral sin una respuesta oportuna por parte de su empleador.
La normativa tiene como objetivo principal establecer procedimientos claros y obligatorios para prevenir, investigar y sancionar hechos de acoso, además de garantizar la reparación del daño a las víctimas.
La ley aplica tanto al sector privado como al sector público, incluyendo empresas grandes, medianas y pequeñas. Entre sus principales focos se encuentran:
El empleador tiene ahora una responsabilidad activa en la prevención y gestión de estas situaciones, y su omisión puede generar consecuencias legales, incluyendo multas, demandas o incluso indemnizaciones por daños.
Las empresas están obligadas a contar con un protocolo formal que incluya:
Este protocolo debe estar integrado al reglamento interno de la empresa, y debe difundirse activamente a todos los trabajadores.
La ley exige que exista un canal claro y accesible para recibir denuncias de acoso o violencia, que garantice la confidencialidad y el respeto por el debido proceso.
Contar con sistemas digitales de trazabilidad documental y control de procesos, como los que ofrece GeoVictoria, facilita la recepción, registro, derivación y seguimiento de estas denuncias, aportando transparencia y eficiencia en la gestión interna.
Una vez recibida una denuncia, el empleador debe activar una investigación interna, siguiendo los plazos establecidos en la ley. Si no es posible realizarla, debe remitir los antecedentes a la Dirección del Trabajo. Las empresas no pueden ignorar ni aplazar estas obligaciones.
Es obligatorio conservar todos los antecedentes relacionados con la denuncia, investigación, medidas adoptadas y resoluciones, garantizando su confidencialidad y trazabilidad. Esto refuerza la necesidad de contar con una solución de gestión documental segura, donde cada acción quede registrada, como la que provee GeoVictoria.
El incumplimiento de esta ley ya no se considera solo una falta administrativa, sino un incumplimiento grave de la obligación de protección del empleador hacia sus trabajadores.
La prevención comienza por el ambiente laboral. Promover el respeto mutuo, la comunicación abierta y la igualdad de condiciones ayuda a reducir los factores que favorecen la aparición de acoso o violencia.
Capacitar a líderes, jefaturas y trabajadores en temas de acoso laboral y violencia es clave para que todos conozcan sus derechos y deberes, así como los mecanismos disponibles para actuar ante un conflicto.
GeoVictoria apoya a las organizaciones en este proceso con su módulo de control de asistencia y gestión de turnos, que puede ser complementado con métricas de bienestar laboral, ausentismo y rotación, para detectar patrones de riesgo.
Un entorno laboral saludable y la eficiencia de los recursos humanos requieren procesos ordenados y transparentes. La digitalización del control de asistencia, gestión documental y trazabilidad de interacciones internas permite identificar puntos de fricción, generar alertas tempranas y actuar proactivamente ante posibles casos.
Un canal de denuncias eficaz debe garantizar confidencialidad, protección al denunciante y trazabilidad. Muchas empresas están optando por soluciones digitales que registran automáticamente el ingreso de la denuncia, notifican a los responsables internos y permiten hacer seguimiento de forma segura y auditada.
La Dirección del Trabajo tiene la facultad de:
Contar con registros claros, informes automatizados y documentación disponible en línea, como los que se pueden generar desde la plataforma de GeoVictoria, agiliza cualquier requerimiento de esta entidad y fortalece la posición de la empresa frente a una inspección.
La Ley Karin marca un antes y un después en la forma en que se debe abordar el acoso y la violencia laboral en Chile. Ya no se trata solo de buenas intenciones, sino de cumplir con obligaciones legales concretas, con protocolos definidos, plazos establecidos y consecuencias claras ante el incumplimiento.
Para las empresas, esto representa un desafío, pero también una oportunidad para construir culturas laborales más sanas, atractivas y productivas. Apoyarse en tecnología como la gestión documental segura, el control de asistencia digital y los reportes trazables de GeoVictoria puede marcar la diferencia entre una gestión reactiva y una prevención proactiva.
Cumplir con la Ley Karin no es solo evitar sanciones: es demostrar compromiso con el respeto, la dignidad y el bienestar de quienes forman parte de tu organización.