Ley de Trabajo Remoto: todo lo que debes saber
Descubre todo lo que debes saber sobre la Ley de trabajo Remoto en Colombia. Conoce las obligaciones y derechos que contempla la norma.
Conoce qué exige la reforma laboral 2025 para empresas y plataformas que operan con domiciliarios, repartidores y trabajadores de apps en Colombia.
La reforma laboral aprobada en Colombia en julio de 2025 marca un antes y un después en el modelo de trabajo de los domiciliarios y repartidores que operan a través de plataformas digitales. Este cambio busca garantizar derechos laborales en uno de los sectores más activos y menos regulados de los últimos años.
El nuevo marco normativo, impulsado por el Gobierno Nacional, obliga a empresas como Rappi, iFood, Uber Eats y otras a reconocer formalmente a quienes prestan servicios de entrega. Ya no será suficiente contar con esquemas de trabajo independientes sin respaldo legal: ahora deberán existir contratos o aportes compartidos a seguridad social, conforme a las normas y leyes laborales vigentes.
Aunque la reforma aún no ha entrado en vigencia —se espera que lo haga en septiembre de 2025—, las empresas que dependen de estos trabajadores deben comenzar a prepararse. El incumplimiento puede dar lugar a sanciones económicas y procesos administrativos por parte del Ministerio de Trabajo.
Este artículo explica qué exige la reforma, a quiénes aplica y cómo adaptarse si tu empresa contrata domiciliarios directamente o por medio de terceros.
La reforma laboral 2025 establece que toda persona que trabaje como domiciliario o repartidor debe estar formalizada. Esto implica nuevas obligaciones tanto para plataformas digitales como para empresas que subcontratan estos servicios.
En concreto, las plataformas deberán:
Vincular formalmente a los repartidores, ya sea mediante contrato laboral o, si operan como independientes, asumir parte de los aportes a salud, pensión y riesgos laborales.
Registrar detalladamente la jornada laboral, sin exceder los límites legales, incluyendo horarios nocturnos o fines de semana.
Garantizar condiciones mínimas de seguridad laboral, especialmente en operaciones móviles o sin sede fija.
Estas exigencias buscan cerrar los vacíos legales que durante años dejaron a miles de trabajadores desprotegidos.
Aunque la norma permite continuar con esquemas de trabajo independiente, las plataformas deben demostrar que no existe subordinación ni dependencia económica. Si esto no se cumple, la ley presume una relación laboral, lo que puede derivar en sanciones por evasión o incumplimiento, conforme al Código Sustantivo del Trabajo.
Por su parte, las empresas que tercerizan entregas deben prestar especial atención a:
Verificar que sus proveedores cumplen con la normativa.
Revisar y actualizar los contratos actuales.
Implementar mecanismos de trazabilidad laboral que respalden el cumplimiento ante cualquier auditoría o requerimiento legal.
Con la entrada en vigor de la reforma laboral 2025, las empresas que trabajan con domiciliarios o repartidores deberán elegir entre dos modalidades: contratarlos formalmente como empleados o trabajar bajo esquemas de independencia con aportes compartidos. Esta decisión tiene implicaciones legales, operativas y financieras.
Depende del nivel de control que se ejerce sobre el trabajador, la exclusividad del servicio y la frecuencia con la que presta sus labores.
A continuación, explicamos las diferencias clave:
| Contrato laboral |
Trabajo independiente con aportes compartidos |
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Más allá de la modalidad contractual que se elija —dependiente o independiente—, la reforma laboral 2025 establece nuevas responsabilidades claras para todas las empresas que operan con repartidores o domiciliarios.
Esto incluye:
En ese sentido, el cumplimiento no depende solamente del contrato, sino de cómo se ejecuta la operación. Tener control, evidencia y procesos claros es clave para evitar sanciones del Ministerio de Trabajo, reclamaciones de los domiciliarios o incluso la pérdida de beneficios fiscales.
La anticipación será el mejor aliado de las empresas que buscan adaptar su operación al nuevo marco legal sin comprometer la eficiencia del negocio.
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La reforma laboral 2025 redefine cómo las empresas deben vincular y gestionar a repartidores y domiciliarios. Ya no se trata solo de cumplir con requisitos legales, sino de asumir una nueva responsabilidad empresarial, basada en trazabilidad, condiciones dignas y control operativo. Esto obliga a revisar procesos clave como la asignación de turnos, registro de jornada y pago de recargos, especialmente en sectores con alta rotación o trabajo móvil.
En este contexto, GeoVictoria se convierte en un aliado estratégico. Su tecnología permite automatizar el control de asistencia, seguir rutas con geolocalización en tiempo real y generar reportes legales listos para auditorías. Esto no solo asegura el cumplimiento de la normativa, sino que también mejora la eficiencia operativa y reduce riesgos jurídicos. Adaptarse a tiempo es una oportunidad para operar con mayor transparencia y sostenibilidad.
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